viernes, 16 de septiembre de 2016

Servir con lo que somos y tenemos

El Evangelio de hoy nos dice que Jesús iba caminando de un lugar a otro acompañado de los Doce y de muchas mujeres que lo ayudaban con sus bienes (Lc 8,1-3).


Esto me hacía pensar que todo lo que tenemos nos ha sido dado por el Señor: familia, amigos, cualidades, posibilidades... Bienes de todo tipo: materiales y espirituales; todo lo hemos recibido por pura gracia de Dios. Él sólo nos pide que Le sirvamos con todo eso, como hacían aquellas mujeres que lo seguían por los pueblos y las ciudades de Palestina.


¿Cómo servir al Señor? La respuesta a esta pregunta es variada y extraordinariamente rica: somos diferentes y, por eso, nos complementamos. El Señor nos ha hecho a cada uno de un modo concreto -Él sólo sabe contar hasta uno- de tal manera que todos necesitemos de todos. 

Detente unos minutos para preguntárselo y descubrirás cómo puedes poner todo lo que eres y tienes a Su disposición para servicio de los demás.